Tránsito Difícil

Tránsito: un elemento fundamental en el equilibrio de nuestra salud.

No nos damos cuenta de lo importante que es defecar con regularidad y sin problemas todos los días.

Cada día, cuando comemos, absorbemos los nutrientes de nuestros alimentos (vitaminas, minerales, ácidos grasos, polifenoles, oligoelementos, fibra, proteínas) y los residuos pasan al colon, donde se eliminan en las heces. Además de residuos alimentarios, están todos los residuos hormonales que nuestro organismo ha producido y que ya no necesita. Si el cuerpo no elimina estos residuos, se reintroducirán en el torrente sanguíneo y no serán reconocidos como "elementos normales". El cuerpo intentará eliminarlos pero, si se acumulan, pueden causar una serie de problemas, a veces graves.

Causas:

Las causas de los problemas de tránsito son múltiples: alimentación desequilibrada, desequilibrio de la flora intestinal, estrés, sedentarismo y ansiedad.

Muchos medicamentos también pueden causar estreñimiento: ansiolíticos, antidepresivos, antiinflamatorios, relajantes musculares, hipotensores, diuréticos y otros, así como los laxantes si se utilizan durante periodos prolongados.

La flora intestinal es la clave de una buena digestión: está formada por varios tipos de bacterias, cada una con funciones diferentes.

La flora bacteriana del colon izquierdo, denominada flora de putrefacción, se encarga de transformar los residuos proteicos (carne, proteínas vegetales transformadas de forma incompleta en el intestino delgado). La flora del colon derecho, denominada flora de fermentación, transforma los azúcares. Una dieta demasiado rica en proteínas provocará un desarrollo excesivo de la flora de putrefacción y una alimentación demasiado rica en azúcares provocará un desarrollo excesivo de la flora de fermentación. Cualquier desequilibrio altera el tránsito, generando toxinas que, en caso de estreñimiento, se reintroducen en el torrente sanguíneo.

Consecuencias. Una ralentización del tránsito intestinal puede provocar:

- Estreñimiento agudo y crónico.
- Estreñimiento atónico.
- Hinchazón, a menudo gases malolientes.
- Desequilibrio de la flora intestinal.
- Inflamación de la pared intestinal (colitis).
- Hiperpermeabilidad de la pared intestinal.

Se trata de plantas medicinales con propiedades laxantes suaves y no creadoras de hábito. Le permitirán volver gradualmente a un tránsito normal y regular.

Un potente probiótico que reequilibra la flora intestinal y ayuda a restablecer el equilibrio del tránsito.

Es un prebiótico natural que aporta todos los nutrientes necesarios para alimentar las bacterias buenas de nuestra flora.